I.- ORGANIZACIÓN DE LA VIDA
Una de las características más
sobresalientes de la vida es la organización.
Partiendo de la organización celular
de cada organismo individual pueden identificarse otros niveles. Si estudiamos
las interacciones que ocurren dentro de los grupos de organismos y entre un
grupo y otro, es posible detectar una jerarquía de complejidad mayor.
I.2. Niveles de organización.
La organización química es la más simple y abarca las partículas básicas
de toda la materia. El átomo es la unidad más pequeña de un elemento químico
(sustancia fundamental) que aún conserva las propiedades características de
dicho elemento. Así, un átomo de hierro es la cantidad más pequeña que puede
obtenerse de ese elemento. Los átomos se combinan químicamente para formar
moléculas. Por ejemplo, dos átomos de hidrógeno se combinan con uno de oxígeno
para formar una molécula de agua. Los niveles que se identifican en la
organización química son: átomo, moléculas y compuestos.
Por su parte, la organización
biológica parte de la célula como
nivel básico, tanto estructural como funcional en los seres vivos. Las
moléculas se asocian para formar la materia viva, que se mezcla de tal manera
que da origen a unidades complejas o estructuras subcelulares llamadas organelos. La membrana celular que rodea la célula y el núcleo son ejemplos de organelos.
Cada célula está formada por un cuerpo
discreto de citoplasma gelatinoso, rodeado por una membrana celular. Los
organelos están suspendidos en el citoplasma.
En la mayoría de los organismos pluricelulares, las
células se agrupan para formar tejidos,
como el tejido muscular y el tejido nervioso. Los tejidos, a su vez,
están organizados en estructuras funcionales llamadas órganos, como el corazón y el estómago. Las funciones biológicas
son realizadas por un conjunto coordinado de tejidos y órganos, llamado sistema
de órganos. Al funcionar juntos, con gran precisión, los sistemas de órganos
integran el organismo pluricelular
complejo.
La organización
biológica por tanto se inicia en la célula
y va desde el tejido, órgano, sistema de órganos y organismos.
Todos
los organismos conviven entre si para generar la organización ecológica, que
implica el compartir el hábitat y vivir e intercambiar con el entorno. Cuando
los organismos de la misma especie habitan en un área dada constituyen la población o nivel básico de la
organización ecológica. Varias poblaciones compartiendo el área integran la comunidad. Una comunidad puede estar
formada por centenares de tipos diferentes de formas de vida. El estudio de la
manera en que los organismos de una comunidad se relacional entre sí y con su
medio ambiente recibe el nombre de Ecología. En vista de que la comunidad
biológica ocupa un espacio físico la combinación de ambos da origen a otro
nivel de organización más complejo llamado Ecosistema. La reunión de todos los
ecosistemas y el lugar que ocupan dentro del planeta es a lo que llamamos
Biosfera (o Ecósfera).
Niveles
de organización de la vida:
Organización
a nivel químico. Composición de la célula.
La célula presenta una organización
química donde la materia y la energía se manifiestan con los mismos principios
que rigen para la materia no viva.
Como se señaló en los niveles de
organización, las unidades estructurales de la materia son los elementos. La
unidad biológica es la célula, en ella, solo un cuarto de los elementos presentes
en la naturaleza (cerca de 30) toman parte. La proporción de esto varia con el
tipo de organismo. Los cuatro elementos más abundantes son el Carbono (C), Hidrógeno
(H), Oxígeno (O), Nitrógeno (N), que en total representan el 96% de la
composición de las células en los humanos. Otros elementos de importancia son
el Calcio (Ca), Fósforo (P), cerca de un 3% y el 1% restante formado por
microelementos que como el Potasio (K), Sodio (Na), Azufre (S), Cloro (Cl),
Yodo (I), Hierro (Fe), Magnesio (Mg), Molibdeno (Mo) y Cobalto (Co) son
esenciales para el buen funcionamiento celular.
El Carbono es el
elemento esencial en la conformación de los compuestos orgánicos del
protoplasma, por la capacidad que tiene de formar cadenas y anillos,
estructuraras que permiten que los otros elementos se una a el.
Los componentes
químicos que forman estos elementos se encuentran en la célula formando sus
principales estructuras o proporcionándoles energía. Estos pueden dividirse en inorgánicos, que son sustancias simples
y orgánicos que son moléculas complejas.
El cuadro siguiente representa los compuestos genéticos más importantes y su
función en la célula.
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